viernes, 30 de enero de 2009

Día 91 Poesía 91

I
Hay lugares que no se ven.
Hay lugares que no se oyen.

Hay lugares que no se ven.
Hay lugares que no se oyen.

Hay lugares que no se ven.
Hay lugares que no se oyen.

II
Te siento desde muy lejos
siento que vienes caminando
muy lentamente vienes caminando
y yo te siento.

III
Se agita mi sombra,
se estremece mi sombra:
es la posibilidad de tu presencia.

IV
Quisiera lamer el ruido de las suelas de tus zapatos
en el día de lluvia en que llegaste a mi.
Pero tus pies están siempre limpios
apenas rozas el suelo.
Me quedo sin el sabor
me quedo sin ti.

V
¿A donde te has ido en este instante?,
escucho esta poesía y no te veo.
¿A donde te has ido en este pequeño minuto?,
pasan los versos y no te veo.
Si no estas en la poesía,
¿dónde estarás?

jueves, 29 de enero de 2009

Día 90 Poesía 90

"les pido respeto para ustedes mismos,
solo así podran respetar a los demas"
Santiago Lombardi
¿Que son esas pequeñas cosas que se dicen por ahí?
que hablan de grandes sentimientos
sueños de impresiones inusitadas
¿utopías salvajes?

Hay cosas que no podemos negar
¿podemos?
¡¿utopías salvajes?!
o que negarlas sería renunciar a ciertas seguridades
que son, (por lo cierto) (aunque no suene poético), bastante seguras
¿lo son?
¡utopías salvajes!

¡utopías salvajes!
O la justificación perfecta del canto de ese gallo
¡Utopías salvajes!
O la justificación perfecta del latir de tu pecho
ritmo incalculable
canción de la vida

¡Utopías salvajes! (ya lo escribo con mayúscula)
o lo irrefrenable de un sentimiento
¡Utopías salvajes!
El canto del gallo
El ritmo en tu pecho
¡Utopías salvajes!

Tus ojos parpadean incrédulos
tu alma mira para los costados
se quiere escabullir
se quiere arrojar a los rincones
quiere
por belleza y comodidad
ser una hoja liviana
¡Utopías salvajes!
O una base de plomo en la suela de nuestros zapatos
¡Utopías salvajes!
Insomnio de la vida común y corriente
Insomnio de los insomnios
¡Utopías salvajes!

Una piedra en el pecho
La dureza de esa piedra
El peso de esa piedra
El péndulo quieto
El péndulo que va hacia adelante
y no hacia los costados
¡Utopías salvajes!

miércoles, 28 de enero de 2009

Día 89 Poesía 89

Llega un barco
Abro una puerta
Subo a la cabellera de una mujer hermosa
Duermo ahí la dorada siesta
Amanezco en el río de sus pensamientos
Soy la ropa que lleva puesta
Hago mucho mucho ruido
Me sorprendo de mi mismo
Soy otro
Es otro ese el que soy
Es un espejo
Soy el mismo otro
Me arrojo del colectivo
Caigo en la calle
Levanto un adoquín
Me zambullo a ese pequeño agujero
Descanso una tarde
Dos tardes
Varios días
Me voy con el almanaque
Me visto de días
Me adorno de fechas
Soy todo un año entero
Con 29 de febrero incluido
Hago calor
Tengo calor
Me soplo
Me lluevo
Me escribo
Me abro un paraguas
Y me cuido de la lluvia
Arrojo gotas de agua
Relampagueo
Trueno
Riego la tierra
Agito las hojas
Soy un sonajero de ruidos nuevos
Me escribo todo
Otra vez de nuevo
Me inclino
Sonrío
Soy río (de pensamientos y palabras)
Agua de aguas
Agua de letras
Letras de aguas
Aguadas de aguas letradas
Escritas de letras de aguas aguadas
Que mojan y dicen
Dicen y mojan
Mojo un espacio vacío
Lluevo en cada rincón
Lluevo en verano
En versos
En otoño
Me moja una letra
Me dice una letra
Me letra una dice
Me letrea una dicción
Me hago consonante
Me jubilo de vocal
Me recibo de recibir recibimientos
Me enamoro de la b larga
Me gustan las altas
Me gusto
Crezco
Asciendo hasta el punto de la i
Pateo ese pequeño lunar
Pateo ese pequeño circulo
Circulome
Redondeome
Me pierdo en mi círculo
Circularidad mía en la que yo mismo me pierdo mientras me pierdo
Veo un agujero
Veo un agujero negro
Salto el medio de una O
Caigo
Caigo
Caigo y caigo
Y sigo cayendo
Hasta que termino justamente de caer
Era onda la O
Era profunda la O
Toco el suelo de la O
Sueno contra el suelo de la O
Hago ruido contra el suelo de la O hacia el final de mi caída
Ruido metálico de letra oxidada
Me agoto de mi tiempo
Oxidome en el fondo de la O de la palabra circulo
Circulo que soy
No por la c
No por la i
No por la r
No por la c
No por la u
No por la l
No por la o
Sino por el ruido de la palabra
Por ella misma
Por su ruido
Por su decir
Su ruido que es su disfraz
Que se agota en una lengua que se queda quieta
En un dibujo redondo de una letra que rueda
Mientras adentro yo reboto
Reboto y me digo
Me digo con o
Me digo con tiempo
Me digo con o con tiempo y con decir
Y con todas las letras de esa oración
Me digo antes
Me digo después
Me escribo
Me agito
Me respiro
Me exalto
Por no terminar
De decir
Me
De escribir
Me


(silencio de palabras escritas
latido que late)

martes, 27 de enero de 2009

Día 88 Poesía 88

Mi persona se regodea a cada instante por los minutos perdidos
en la búsqueda irrefrenable que son las esquinas de tu cuerpo
(tu humanidad tendida en la cama es un agujero negro del universo)

Después de hacer el amor nos miramos largamente
Después de hacer el amor nos miramos largamente

Después de hacer el amor me miras largamente
Después de hacer el amor te miro largamente
Después de mirarnos largamente nos encontramos
Nos encontramos bien a lo lejos
Nos encontramos
En el largo desfiladero que son tus ojos y tu cuerpo
En el largo momento que es estar con vos
En el largo lugar que es tu cuerpo
En el pequeño destello de tus labios brillantes
Nos encontramos
Y nos abrazamos a esa piedra que es el estar juntos

lunes, 26 de enero de 2009

Día 87 Poesía 87

Veo que hay algo en el cielo
La veo es una estrella roja de mil puntas
Voy a estrellarme en su centro
Voy a llorar cielos y mares
Voy a llorar cielos rojos y mares azules
Voy a llorar continentes enteros
Voy a llorar una lluvia de estrellas
Voy a llorar en lugares secos
Voy a llorar
Voy a tu centro estrella divina
Voy a tu cielo
Voy con lágrimas pegadas a mis mejillas
El polvo me seca los ojos
El polvo se pega a mi ropa
Camino desandado caminos
Camino pidiendo silencio a mi paso
Camino con los pies descalzos de amores
Camino hacia arriba
Camino mirando el suelo que se aleja de mis pasos
Camino
Y el camino se angosta y tu sonrisa ilumina
Tu cielo me cubre
Tu suelo me sostiene

Me arrodillo al llegar

Luego caigo de espaldas y miles de luces beben de mis ojos
Y ya me olvide de mí
Y ya no tengo letras para decirme
Ya no tengo espacio para medirme
No tengo lágrimas para llorarme
No tengo tiempo para perderme
No tengo dedos para tocarme
No tengo manos para aferrarme
O pies para caminarme
No tengo nada de todo eso que uno tiene cuando
Camina
Llora
Escucha
Ríe
Respira
Vive
Y sin embargo
Muy sin embargo no podría decir que no estoy no vivo
Ni que estoy si muerto
Podría decir que floto
Pues para ello nada se necesita
Podría decir que caigo para arriba
Pues para ello nada se necesita
Pero no puedo
Pues he perdido las palabras
Me agoto en un instante
Me caigo y me levanto sin caerme ni levantarme
Me miro y me pierdo en mi propia mirada
Porque no tengo ojos
Me duermo y me sueño
Soy mi propia noche
Soy mi día
Mi mañana
Mis ojos
Mis venas
Mi humanidad entera
Soy mi humanidad entera que se pierde en los espacios que ocupa
Me pierdo en los espacios que ocupo
Me encuentro donde menos me espero
Ya no me busco
Ya no me encuentro
Y todo esto por un viaje por las estrellas
Todo esto por ti por mí por nosotros y por ellos
Todo esto por las mismas palabras que gotean
Todo esto por las ruinas de lo que fui en la tierra
Todo esto por la sangre que corría por mis venas
Todo esto por los años de mi vida
Todo esto por el vía crucis interminable de ideas insobornables que atestiguaron mi vida
Todo esto por la extensión irremediable de mis dedos
Por mis dedos que se extienden y tocan el cielo

sábado, 24 de enero de 2009

Día 86 Poesía 86

G
A
Z
A

No se trata de esto
O de aquello
O de eso que esta allá
O de estas cosas que están acá
bien cerca mío
No se trata de nada
De nada de nada

No hace falta ojos para ver esas a-tro-ci-da-da-des
Y sin embargo las vemos
Y se nos abren más los ojos
(¿o se nos cierran?)
no hacen falta ojos porque este asunto se huele desde lejos
se escucha desde hace tiempo

El suelo se relame
La tierra se requiebra
Los animales huyen espantados
Pero el hombre
El hombre!
El hombre persevera con su insistencia de ser superior
Persevera con eso que llaman inteligencia
Persevera y se arroja así mismo a los abismos
(¿Disfruta la caída?)

¿De que nos sabemos culpables?

viernes, 23 de enero de 2009

Día 85 Poesía 85

Dejas en el río flotando
La estela de lo que han sido estos días
Días colmados
Días que rebalsan
Su recuerdo
como el agua del río
Nos empapa
Quedamos mojados de lo que ha sido
Quedamos húmedos por el pasado
Quedamos aguados por el mismo tiempo que nos recuerda que las cosas mojan
Las cosas mojan
Todas las cosas que han ido cayendo hacia lo hondo del río nos mojaron
Estamos mojados

Y estar mojados es anecdótico
es anecdótico
así como lareputamadrequelospario es anecdótico
que te acuerdes de ti de mi o de quien sea
todo esto y mucho mas también es condenadamente anecdótico

que estés aquí es anecdótico
que estés allí es anecdótico
todo lo es
y sin embargo
sin embargo
te callas la boca de tanto en tanto
cierras tu bocota por una milésima de segundo
(se filtra el universo entero en esa milésima de segundo
te bebes todo el tiempo de un solo saque
naces y mueres en un condenado segundo
sin siquiera pestañear
mueres con los ojos abiertos
naces con los ojos abiertos)

te sigues sorprendiendo
pues claro dice el poeta
como no hacerlo
como carajo no sorprenderme con cada bofetada
como no gritar de exaltación
como no morir de sorpresa en cada poesía
como no estar dispuesto a arrojar sobre una hoja de marchito papel todo
absolutamente todo
todo lo que soy
lo que no soy
lo que deseo
lo que no deseo
todo absolutamente todo de todo
en un intento irrefrenable de salir bien afuera de mi mismo aunque mas no sea por un tiempo tan pequeño que no entra en la mitad de la mitad de la mitad de un segundo

¿Qué haría sin la maldita sorpresa que golpea mi cara y me devuelve la frescura aunque este abajo en lo hondo del río?

jueves, 22 de enero de 2009

Día 84 Poesía 84

Siendo lo que eres:
El prefacio ineludible de lo que va a pasar
Yo quisiera que
Te despiertes más a menudo que
Observes el día con otros ojos que
Muerdas la luna cada noche que
Saludes a las abuelas cada feriado

Pero lo que haces ya no encuentra ni punto de comparación con lo que hacías
Y lo que hacías era algo grande,
Eso si era algo grande
Ahora das vueltas
Pero muy pequeñitas
Muy muy muy pequeñitas
Si apenas giras sobre tu mismo eje
Si apenas alcanzas a poner en el medio del pequeño circulo que describes con tus pasos
una manzana
Una pequeña manzana roja
Y dices voy a dar la vuelta a la manzana
Y colocas tu manzanita roja de vergüenza en el medio de tus pasos
Caminas alrededor de ella y sonríes
Y tu sonrisa me da alguna esperanza pero más quisiera yo una gran esperanza
De esas esperanzas que dan ganas de arrojar la vida por ahí y sentarse a esperar
Más quisiera yo ese tipo de esperanza
Pero tu esperanza es apenas una gota de rocío
Es una esperanza tan ridícula
Pero tan inobjetable
Una esperanza tan desmedidamente pequeña
Pero tan certera que
Dan ganas de acariciarte
Dan ganas de morder tus angustias y hacerlas pedazos
De lamer tus heridas
De llorar tus alegrías
De cantar tus cantares
De decir tú nombre mil veces
De escribir tú nombre mil veces
En fin
De amarte tan desesperadamente como
se amó
se ama
y se amara
cualquier pedazo de libertad

miércoles, 21 de enero de 2009

Día 83 Poesía 83

Has iniciado la caída
Golpeaste la última puerta
La puerta por donde salía el sol cada mañana
Y es preciso que ahora ahorres en lágrimas

Hecha a correr
Hecha a correr sin más dilaciones
Que lo que te pisa los talones no es mas que la angustia forzada de las cosas que han sucedido

Hecha a correr y ya no te detengas

Desliza las plantas de tus pies por el horizonte
Esa línea de aguja que divide el mundo

Las ramas de los árboles te saludan al pasar
Los animales suspiran y bostezan cuando rozas sus bigotes
Ya nadie se sorprende
Ya no te sorprendes

En tu corrida loca te has olvidado de ti mismo
Ya eres parte del mundo tal como lo conocemos
En tu corrida loca has perdido tu piel
No eres más que huesos que se acomodan al viento
No eres más que huesos que corren con el viento
No eres más que cenizas que el viento se lleva
Cenizas que el viento se lleva

martes, 20 de enero de 2009

Día 82 Poesía 82

Me he recostado
Descanso tendido sobre el día que se avecina
Las agujas de los relojes me hacen cosquillas en la espalda
Soy un nuevo instante
Entre la desidia presente y la atrofia del futuro
Soy parte del tiempo y por eso importo
Por eso acontezco
No tengo remedio

Cuando despiertes del nuevo día
(que ya no viene)
veras que lo que ha sucedido tiene que ver con tu ilusión marchita
Pero tú al tener ojos crispados no lo has notado
Las jaulas que has abiertos hoy se lucen como adornos en árboles de navidad
Las horas que has pasado hoy son gotas de la inacabable lluvia del pasado
Y del pasado ya no recuerdas nada

Las soledades a las que acudes
Los árboles a los que enverdeces

Los árboles solos
Y las soledades alboreadas

Tu misma
Y yo bastante solo

No desesperes me dijiste
No desandes el error
Camina
Salta
Canta
Baila
Ya nada es importante
Al menos eso parece

Soy yo el que pasa raudamente entre desfiladeros
Soy yo el que lame tu espalda
Soy yo el que acaricia el lomo de la ciudad por la noche
Soy yo el que respira nubes cargadas con lluvias
Soy yo el que te desea impertérrito
Soy yo el que limpia con la lengua los lomos de los libros del siglo pasado
Tengo el sabor de un mar
Tengo la sal de un mar
Tengo el sol del océano
Tengo caracoles y sirenas
Te tengo y me tienes
Me tienes y te tengo
Te conozco desde el fondo del océano
Eras una estrella de mar que se arrastraba por el lecho marino
Yo era la sal y te besaba
Yo era el agua y te mecía
Yo era el agua y te abrazaba
Yo era tu casa
El océano entero

lunes, 19 de enero de 2009

Día 81 Poesía 81

Aquí ya los niños no lloran ni ya los niños ríen
Simplemente aquí los niños nos acorralan
Son ellos con sus sonrisas desbordantes los que debieran dar órdenes

Acurrucados en un cuarto de hotel
El la ama
Ella lo ama
Pero no se aman

El tiempo se añeja de mirarnos pasar
El tiempo se añeja de vernos pasar
El tiempo nos patea al vernos pasar

Has dicho que te olvidaste de las cosas que dices
Ya la vejez te azota los pasos
Hablas como un cisne
Revoloteas como un caballo
Salpicas tu bronca
Y a pesar de viejo
Eres muy joven

¿A dónde se han ido los instantes que pasan?
¿Por qué no podemos encuadrar los momentos?

Has presentado tus impuestos
Has abonado tus deudas
Ya no tienes tu miseria
Ya no tienes tu tristeza
Que hacer
Que haces con el sentimiento inenarrable de los quantums que te azotan en este pedazo de realidad en el que te zambulles cada día apenas sales de la cama y olvidas los sueños que no debieras haber soñado
Que haces
Lo bajas con el desayuno
Lo dejas en el baño
Lo olvidas mientras paseas al perro
Lo transpiras en tu caminata matutina
O lo suspiras
O lo bostezas

sábado, 17 de enero de 2009

Día 80 Poesía 80

“Por todos los caminos llego a lo impenetrablea
lo que sirve de nada”
Enrique Lihn en su poesía “Rimbaud”
I
Es menester que me aleje de un instante
Y que por un momento alocado y gris sea esa persona libre de insomnios y de amaneceres
Es menester que me cante el gallo cada mañana
pero no voy a permitir que mi boca parlotee injusticias sin que yo mismo me haga pagar por eso
y así por lo tanto he de andar caminando con la cabeza entre mis manos azotando las ideas pasadas y cocinando a fuego lento el día que ha de venir una vez que saque el sol de la bolsa.

II
Te has salido del instante en el que te dormías
Ahora yaces despierto en un momento que no tiene nada que ver contigo
y la tierra que has acumulado a lo largo y ancho de estos años no alcanza para cubrir tu cuerpo
dormirás desnudo de ti mismo
dormirás desnudo de ti mismo y desnudo de tierra
de la misma tierra que te alimentabas en sueños
de la misma tierra que pisabas en sueños

III
de esa misma tierras estas hecho
de esa misma tierra estamos hechos

IV
la tierra se espanta de las sombras que proyectamos debajo del sol de mediodía
y no hacemos mas que llorar a rienda suelta
mojando la tierra y sus alrededores

V
La tierra se sacude

viernes, 16 de enero de 2009

Día 79 Poesía 79

Hemos llegado a un acuerdo
Por fin hemos acordado
Nos hemos puesto del mismo lado
Caminamos ambos dos
Ambos todos
En la sola dirección acordada
Parece raro pero así es
Nuestros ojos miran el mismo punto en el camino
Nuestras manos
Nuestras piernas
Nuestro cuerpo todo añora lo mismo
Desea y añora lo mismo:
Esa escasa situación de la que ya no recordamos ni el nombre ni el color

jueves, 15 de enero de 2009

Día 78 Poesía 78

La urgencia inmediata de quien pierde un ojo por mirar la desidia ajena se convierte en un pájaro de tres que alas que a pesar de eso no puede volar por tener huesos de plomo; en esto redunda la estridencia que nos invita hoy y solo por hoy a ver las cosas de otra manera.

miércoles, 14 de enero de 2009

Día 77 Poesía 77

El tiempo que se posa sobre el tiempo
Yo que me acorralo con mi mismo yo
El tiempo que se desenvuelve como papel higiénico
El tiempo que no tiene olor ni a tiempo
El tiempo que se arrastra
El tiempo que se arrastra
El tiempo que grita cosas a lo largo del tiempo
Grita palabras a lo largo del tiempo
Grita grita y grita más palabras a lo largo del tiempo
El tiempo que se acomoda en la cama
Se tapa con el cubrecama
Estira las piernas
El tiempo descansa
El tiempo duerme
El tiempo duerme porque esta cansado
El tiempo duerme porque esta cansado de su propio tiempo
De mi tiempo de tu tiempo (vallejo perdon)
El tiempo esta cansado del tiempo
El tiempo esta cansado de perder su propio tiempo
Ya no le queda tiempo al propio tiempo
El tiempo
El tiempo esta rojo de esperar
El tiempo esta rojo de no tener tiempo
El tiempo no tiene tiempo
El tiempo no se tiene
Pues se canso de repetirse
El tiempo no se tiene y nosotros no lo tenemos
Hemos gastado el tiempo
Ya no queda tiempo ni para el tiempo mismo
Ya no hay mas remedio
Y no hay por otro lado nada que remediar
No hay tiempo en el cual remediar las mismas gotas que se le caen al tiempo
Se le cayeron ya las últimas gotas al tiempo
Ya no gotea el tiempo
El tiempo ya no gotea
Y ya nada cae entonces del cielo
Si antes llovía tiempo ahora nos azotan las agujas
Nos azotan las agujas del tiempo
Nos azotan de nuevo las agujas del tiempo como en otro tiempo
El tiempo se arrastra
Yo me arrastro el tiempo se arrastra todo se arrastra el se arrastra el tiempo se arrastra las letras se arrastran yo me arrastro tu te arrastras el se arrastra el suelo se arrastra el cielo se arrastra todos nos arrastramos en este mismo momento que digo arrastrar digo arrastrar y me arrastro sobre el suelo de la tierra que gira y rebota por el universo

Trepo con mi lengua
Y me muevo gracias a ella
Avanzo
Sacudo el polvo
Escupo el polvo
Y ahora digo el polvo
Escribo con polvo
Digo el polvo
Y el polvo se dice y se escupe así mismo
El polvo también puede decirse no miren con esas caras de señoras gordas
El polvo también puede decirse y de hecho se dice
El polvo también puede decirse y lo hace efectivamente
O no escriben los santos mortales autobiografías en las que se dicen
¿Y podemos
¿Y debemos
¿Y queremos
¿Y quisiéramos
¿Y pudiéramos
¿Y debiéramos
Considerarnos algo más que polvo?